Caño, taquito y volea

Más reciente

Dos bandas, un carril

Bp9uudwCYAECNJd

Polémica a parte, el partido entre Brasil y Croacia estuvo marcado por algunos duelos personales. De todos ellos, dos marcaron la diferencia. Ambos nacían y morían en bandas opuestas, según se mire. Además de estos dos enfrentamientos posicionales, un as que empezó el partido desde la izquierda apareció en el momento clave, cuando más se lo necesitaba.

La banda izquierda de Croacia y la banda derecha de Brasil. Olic y Oscar. Alves y Vrsalijko. Un mismo carril. Croacia empezó firme. Dani Alves, con una autopista a su espalda que parecía no tener fin, se despreocupaba por defender, como indica el no siempre acertado mito de los defensores brasileños. Kovac acertó y Olic ejecutó. Un cabezazo cerca y un centro por banda del croata asustaban a los miles de aficionados que colmaban el Arena de Sao Paulo. Poco después, el delantero reconvertido a extremo envío un centro que Marcelo, el lateral de la otra banda, introdujo en su portería. Cuando Croacia se acomodó con el gol, apareció quien debía aparecer. Muy arrinconada a la izquierda, Neymar hizo homenaje al número que lleva en la espalda y dejó la izquierda para liderarse como enganche. Bajó a pedirla y a mostrarse: se puso la mochila que la ocasión requería y encontró su recompensa por el medio. La banda se le queda pequeña.

Empezando por la izquierda, pasando por el medio y terminando en la derecha. Mientras los focos se acercaban a un Neymar destacado, desde la banda opuesta de Olic-Alves iba creciendo un pequeño jugador que encaraba, gambeteaba y se animaba. Oscar fue la figura del partido. Vrsalijko lo sufrió. Alejado de los focos centrados en Neymar, Oscar sabía que era su oportunidad para amarrar su titularidad. Su actitud fue de la mano de su aptitud, que no tiene límites cuando aparca complejos. El gol certificó una actuación que potenciará el rendimiento de la anfitriona, que deberá solucionar aspectos: sus bandas ofensivamente y cuidar más las espaldas de sus laterales, quienes hacen honor al no siempre acertado mito de los defensores brasileños. Dos bandas, un mismo carril. Y Neymar de ’10’.

3ra jornada de Champions: jornada de goleadores

Jornada apasionante de Champions, con partidazos para ser vistos y analizados con lupa. En Real Madrid-Juve, la expulsión de Chiellini condicionó el partido, pero hasta entonces el local ya ganaba 2-1 con dos de Cristiano y un buen Di María. La Juventus deberá ganar sí o sí el siguiente partido para no estar con un pie fuera de la competición. En Arsenal-Dortmund, los ingleses no merecieron perder a diez del final. Una contra de libro rematada por Lewandowski puso paridad en el grupo de la muerte, ya que el Napoli ganó en Francia y hay empate a seis puntos en la cabeza de la zona. En Milán-Barça, Kaká y Robinho se dieron un festín de 20 minutos y lograron sacar un empate contra un Barcelona que jugó sin ritmo competitivo. Dominando el encuentro y con poco remate, logró empatar gracias al gol de Messi, aún en baja forma física. En ManU-Real Sociedad, los palos y el gol temprano en contra de Iñigo Martínez privaron al equipo vasco, casi eliminado ya, de sacar un buen resultado de Old Trafford. Jugadón de Rooney para el primer gol. En Anderlecht-PSG, festival de goles. IbraShow. El sueco dio cátedra de cómo definir y mostró a Europa todo su repertorio: cuatro goles para recordar, en especial el segundo y el tercero. Bajo un aguacero, Benfica y Olympiakos se repartieron puntos y resbalones. En Schalke-Chelsea, Fernando Torres dijo presente con dos goles y el equipo de Mou remontó en la tabla. En Austria, el Atlético y Diego Costa firmaron una buena goleada que los acerca a octavos, más teniendo en cuenta la derrota del Oporto en casa contra el Zenit. Jornada de goleadores.

Plácida victoria de Argentina sin Messi (3-1)

Sin problemas ni apuros. A pesar de empezar perdiendo, Argentina no tuvo dificultades para doblegar a una pobre selección peruana, que, ya eliminada, apenas prestó resistencia en un Monumental al que acudió muy poca gente. Con numerosas e importantes bajas como Messi, Mascherano o Higuaín, Sabella dispuso un ataque con Palacio, Lavezzi y Agüero, que funcionaron bajo la manija de un Di María movedizo y activo.

Con la tranquilidad de tener la clasificación en el bolsillo, Argentina empezó relajada. Perú, mediante Pizarro, aprovechó la fragilidad defensiva de la zaga albiceleste (fallaron Zabaleta y Fede Fernández) y la mala salida de Romero para sellar la sorpresa momentánea. Sin embargo, dos minutos más tarde, Lavezzi puso el empate tras un cabezazo del central Fernández, siempre bien por arriba (especialmente en el área rival). Empate y dudas.

La suplencia de Romero en el Mónaco abre el debate. Si no juega, si no tiene minutos, si no es titular, su presencia en el once es una incógnita, más teniendo en cuenta los buenos desempeños de otros arqueros como Barovero u Orión. La inseguridad de Chiquito fue evidente en el partido de ayer, por lo que su situación en el equipo francés marcará el futuro del arco del seleccionado.

Más dudas y debate existen en la defensa. El funcionamiento colectivo de la línea del fondo mejoró mucho en los últimos tiempos gracias a que Sabella los mantuvo siempre en el equipo. Sin embargo, tampoco transmiten seguridad ninguno de los cuatro de abajo, aunque ya tienen el puesto casi asegurado. La poca continuidad de Fede Fernández en el Napoli y el flojo rendimiento de Rojo (bien en el tercer gol ayer) aumentan las posibilidades de que otros jugadores tengan más oportunidades si juegan con regularidad en sus respectivos equipos. ¿Pueden jugadores sin continuidad en sus clubes jugar al máximo nivel en un Mundial?

A partir del empate argentino, Perú se vino abajo y Argentina comenzó a funcionar ofensivamente (como siempre). Banega empezó a conectar con un Agüero fallón que aguantaba de espaldas al arco. De ahí se generaron las mejores ocasiones, como en el tercer gol del local, de un incansable Palacio, ya en el segundo tiempo. Antes, en una gran jugada colectiva, Palacio había asistido a Lavezzi para poner la ventaja. Gran partido del Pocho, que jugó, hizo jugar, desbordó, asistió y marcó.

Sin sobresaltos, Argentina, ya clasificada, se aseguró el primer puesto en la Eliminatorias y empezó a pensar de lleno en Brasil 2014. Sabella, con la lista y el once muy definidos, debe estar atento a los momentos de forma de muchos jugadores para poder mejorar algunos puntos débiles en el conjunto argentino. Especialmente atrás. Ya todos saben que Argentina es muy fuerte ofensivamente y muy floja en en la retaguardia. Camino de Belo Horizonte, a pensar y progresar.

Imagen: Télam

Previa del Superclásico

SuperclásicoSe viene el Súper. Se viene el clásico de los clásicos. Se viene el Superclásico. River-Boca, Boca-River.

En los últimos años, los partidos entre los dos clubes más grandes de Argentina fueron muy descafeinados. Se jugaba por el honor, por ganarle al máximo rival, pero nunca se jugaba por un título. El pasado año, los dos enfrentamientos terminaron en empate. Esta vez, lejos aún la definición del torneo que lidera Newell’s, el Súper encuentra a ambos equipos con unas aspiraciones generadas por la ilusión y la relativa cercanía con el puntero. Porque el buen juego es una cuenta pendiente para los dos. Tanto River como Boca no lograron encontrar su fútbol.

En un inicio titubeante, el team de Ramón Díaz perdió muchos puntos en el Torneo y, con apuros, pasó a cuartos de final de la Copa Sudamericana. A seis puntos de la cabeza, River no puede dejar escapar los tres puntos para subirse a los puestos de arriba y pelear el campeonato hasta las fechas finales, como ya hizo el año pasado. El nivel millonario, que viene de menos a más (el arquero Barovero es, hasta ahora, el mejor jugador de la temporada), se centrará en la inspiración de Manu Lanzini, generador de todo el fútbol de River, y del aporte de Teo Gutiérrez, que poco a poco va poniéndose a punto en lo físico y en lo futbolístico. Claves serán las entradas por banda de Vangioni y Carbonero. River, en el Monumental, deberá ir a buscar el partido.

En el otro lado, Boca. Un equipo irregular que busca afianzarse en el campo y en la tabla. Sus permanentes lesiones (hasta ¡42!) no permiten que su técnico Carlos Bianchi logre repetir una formación fiable. El eje Díaz-Gago-Riquelme es la piedra angular para quebrar a un rival con dudas defensivas. Si River logra desconectar el juego entre Gago y Riquelme, muchos problemas tendrá Boca para que Gigliotti finalice las jugadas, aunque siempre tiene la vía Sanchez-Miño por la izquierda o el intermitente juego del Burrito Martínez. Otro problema para Bianchi es el funcionamiento de una defensa sin estabilidad hasta la fecha: si el equipo consigue un buen repliegue defensivo, River sufrirá porque le cuesta un mundo entrar en defensas estáticas y bien paradas.

Estos partidos suelen ser cerrados, rácanos y faltos de fútbol, aunque el trío Gago-Riquelme-Lanzini es el que puede aportar esa cuota de juego a los dos equipos. Si no logran funcionar, la pelota parada será clave para las jugadas de gol. Con grandes cabeceadores como Balanta en River o Díaz y Gigliotti en Boca, el tráfico aéreo puede decidir un partido tan trascendental como la grandeza de ambos clubes. Los dos vienen de ganar, a seis y a cuatro puntos de la punta del campeonato, los dos tienen la obligación de ganar. Por honor. Por ganarle al máximo rival. Por no perder el tren del campeonato. Porque es River. Porque es Boca.

Ya llega el Súper. Ya llega el clásico. Ya llega el Superclásico. Domingo, 18.15 horas. Estadio Monumental. River-Boca.

2da jornada Champions: Fáciles caminos para los candidatos

Segunda jornada de Champions League y los grandes favoritos se mantienen líderes en sus grupos. El Barça y el Madrid ganaron. En Escocia, Neymar empezó a demostrar el porqué de su fichaje y el Barcelona busca caminos para reencontrar el juego. El Madrid, sin brillar, tiró de un Di María eléctrico (rabona preciosa y dos goles) y del incombustible Ronaldo para despachar al Copenhague. El Bayern de Pep no tuvo piedad de un triste y apaciguado City y le ganó con calidad y fútbol: gran partido del campeón. La más que eficaz pelota parada de Burgos y Simeone le valió tres puntos vitales al Atlético de Madrid en Oporto. No jugó bien pero ganó como un grande. En Londres, el Arsenal se ventiló al Napoli con veinte minutos extraordinarios de Ozil (gol y asistencia) y compañía. Por lo demás, fundamental victoria del Chelsea en Bucarest, reñido empate entre Galatasaray y Juve (que se complica: debe ganar al Madrid sí o sí), mala fortuna de la Real Sociedad contra el Leverkusen, empate y gracias para el Milán y Balotelli contra el Ajax, y buenos triunfos de Dortmund y PSG en casa. Segunda jornada y se va clarificando el camino para muchos equipos.

1ra jornada Champions: Victorias guionizadas

Primera jornada de la Champions con victorias de los grandes equipos europeos. Lo normal. El único resultado sorprendente fue la derrota del Chelsea a manos de un excelente y ordenado Basilea. Fue la segunda derrota de Mourinho en casa en Champions en toda su andadura en el equipo inglés (la otra contra en Barça en 2006). Después, triplete de Cristiano y de Messi en las sendas goleadas de sus respectivos equipos. El Madrid hizo su mayor goleada fuera de casa en Europa con un Isco que no para de crecer. El Barcelona, sin encontrar aún su mejor juego. Gran victoria del Napoli de Benítez a un Dortmund marcado por la graciosa expulsión de Klopp. El Milán ganó con sufrimiento, el Atleti confirmó que en esta Champions va a dar pelea de la mano del Cholo, el Arsenal de Ozil sacó tres puntos importantes de Marsella, los dos Manchester ganaron, el Bayern de Guardiola también y la Juve sólo logro un empate en Dinamarca. Comenzó la Champions, los grandes candidatos ganaron y el camino a Lisboa solo acaba de empezar.